Sin lugar a dudas Caracas es una ciudad única en muchos aspectos, una de sus características más impresionantes es el cerro que la rodea y la convierte en ese valle llamado Caracas, montaña grandiosa e imponente que separa al Mar Caribe y a la ciudad de La Guaira de la caótica Caracas. Es en esta montaña donde se desarrolla mi aventura, sin embargo previo al relato me gustaría hacerles una pequeña lista de cosas recomendadas para el desarrollo optimo de esta actividad, para que en el caso tal de que mi relato les sirva de inspiración para aventurarse a conocer en el Ávila tengan una referencia:
- Camisa extra
- Termo con agua de 2.0 lts (recomendado)
- Granolas o chocolates
- Frutas
- Algún almuerzo sencillo de transportar como sanduches.
foto de:Estiramientos
Nuestro trayecto comienza en la subida de Sabas Nieves ubicada en el municipio Chacao, cerca del restaurant Tarzilandia. Comenzamos la subida, pero no sin antes realizar los estiramientos correspondientes para no sufrir un calambre subiendo. Comenzamos a subir aproximadamente a las 10:00 am, el recorrido hasta el campamento de Sabas Nieves nos tomó unos 40 minutos, este primer recorrido hasta Sabas Nieves es lo que me gusta llamar el calentamiento, ya que es aquí donde los músculos suelen entrar en calor. Luego de descansar por 20 minutos, seguimos subiendo en dirección a la silla hasta que llegamos a un pequeño mirador donde se puede disfrutar de una hermosa vista de Caracas, el cual es conocido como “el banquito” en le banquito nos sentamos a disfrutar de la vista y a comernos algún refrigerio para así continuar con nuestro camino.
Foto de: Ruta Pico Oriental.
Luego de arribar a “La silla” comienza nuestra ultima etapa del recorrido, el asenso fina hasta el pico oriental. Una vez en “La silla” puedes encontrar dirección, escritas de forma rudimentaria en un piedra, para seguir subiendo y alcanzar tu destino sea cual sea: pico oriental, pico occidental, el hotel Humboldt o el mismo pico Naiguatá. Sin embargo nuestro destino esta vez es pico oriental, el trayecto de “La silla” hasta pico oriental es el más difícil, aunque no es el más largo, si es el más empinado y por está razón es el más difícil. Una vez en el pico oriental, nos llenamos de un sentimiento de superación personal y disfruta de la privilegiada vista que teníamos a nuestros pies, el valle de Caracas tan majestuoso y hermoso como siempre, una anarquía de ciudad, una lucha constante entre las fuerzas de la naturaleza y las del hombre para ver quien se adueña del valle. Recobramos nuestras fuerzas y de inmediato empezamos con nuestro descenso, ya se nos había hecho tarde, luego de 2 horas en marcha constante volvíamos a nuestro punto de partida, 5 horas duro en total nuestra aventura, destruidos del cansancio nos devolvimos a nuestras casas para prepararnos para nuestra próxima aventura.